Páginas

lunes, 12 de diciembre de 2011

"Los pulmones de la Tierra": la importancia de las selvas ecuatoriales.


Selvas del Orinoco en Venezuela. Nubes bajas sobre el bosque
Las selvas ecuatoriales pertenecen a un ecosistema de clima cálido ecuatorial. Se asientan en zonas próximas al Ecuador, ocupando la cuenca del Amazonas y del Congo y las islas de Indonesia y áreas de Indochina. El clima permanece durante todo el año con altas temperaturas que oscilan poco a lo largo del año. Tal hecho y la existencia de fuertes precipitaciones durante todo el año, favorece la proliferación de un bosque denso formado por una gran diversidad de especies, un bosque que resulta determinante para el equilibrio global del planeta.


La selva: densa, frondosa e impenetrable

La selva ecuatorial es una auténtica maravilla de la naturaleza, pero hoy está en peligro En la actualidad ya se han perdido más de la mitad de la superficie de selva existente y la desforestación avanza en todos los frentes. Esa franja verde intenso que existe a ambos lados del Ecuador e identifica la vegetación más exuberante de la Tierra (ver las imágenes satélite de América del Sur y África) puede que adquiera un tono mucho más ocre en un futuro próximo porque el bosque haya desaparecido.


















 La diversidad de especies animales y vegetales (biodiversidad) que habitan en la selva es enorme. La selva contiene más del 60% de la biodiversidad de fauna y flora del planeta. La variedad de especies vegetales se manifiesta en los pocos ejemplares de cada especie existente en cada unidad de superficie. En una hectárea de bosque ecuatorial hay cerca de 500 especies diferentes de árboles. No existen bosques homogéneos típicos de zonas más templadas, donde predominan una o dos especies, encinares, hayedos, pinares, etc. Todavía quedan miles y miles de especies de plantas o insectos por descubrir. En unas decenas de hectáreas de selva indonesia hay más especies que en toda Norteamérica; solo un árbol de Perú puede albergar tantas especies de hormigas como las islas Británicas.

La increíble diversidad de los bosques ecuatoriales se percibe en
 esta imagen. Ärboles de todo tipo se mezclan en las selvas de Panamá.

Un símbolo de la diversidad de la fauna ecuatorial son
 las "aves del paraíso" que habitan en la selva de Nueva Guinea
Este video nos permite ver la diversidad de la fauna ecuatorial amazónica, a través de dos de sus grandes símbolos, dos grandes depredadores enfrentados entre sí, el caimán y la anaconda:

                             

La selva por su inaccesiblidad permite la conservación de culturas ancestrales y primitivas, que hoy apenas resisten ante el deterioro del bosque, presionados por madereros y empresas mineras y petrolíferas, que en su búsqueda de recursos penetran en sus territorios. En el corazón de las selvas se refugian aún pueblos casi inalterados, es el caso de algunos pueblos de las islas Andamán y Nicobar (India), Nueva Guinea o el Amazonas. Su riqueza cultural incluye culturas aún intactas con "pueblos no contactados" que no han entrado en contacto alguno con la civilización moderna y el hombre blanco. La mayoría de ellos se encuentran en parques nacionales brasileños, bajo la protección de las autoridades, pero también los hay en la Amazonía peruana. En estas imágenes de Survival aparece un pequeño grupo recientemente descubierto en Perú.

En estas dos imágenes aparece un poblado en la amazonía peruana. Sus habitantes
 han vivido al margen de la civilización del hombre blanco como evidencia
 su actitud amenazante ante el helicóptero que toma estas imágenes

La enorme diversidad biológica convierte a la selva en una enorme "farmacia natural", debido a la gran cantidad de sustancias naturales curativas que provienen de muchas plantas selváticas y que están siendo utilizadas para la elaboración de medicinas. Es posible, que en el futuro muchas de las enfermedades que hoy acosan al ser humano encuentren su curación gracias a la riqueza de sustancias químicas vegetales existentes en estos ecosistemas.
Por otra parte la selva es una importante fuente de recursos madereros, que si se explotan adecuadamente pueden proporcionar madera para distintos usos durante mucho tiempo, ya que la explotación racional de los bosques asegura su pervivencia. Esto requiere una tala controlada, que permita una regeneración natural del bosque, y políticas de repoblación con especies autóctonas. La selva ofrece gran cantidad de especies de maderas preciosas, son maderas más duras, resistentes y de gran belleza, idóneas para la construcción, el mobiliario, elaboración de instrumentos musicales, etc. La caoba o el ébano están entre las más valoradas y también entre las más caras. Por otra parte la selva supone además una fuente inagotable de combustible para los pueblos cercanos.


Tala de caoba

Las selvas son conocidas como "los pulmones de la Tierra", basándose en que los pulmones son los órganos encargados de suministrar el oxígeno necesario para la respiración, desechando el dióxido de carbono. En realidad, el efecto es el inverso: los vegetales se alimentan de CO2 y liberan oxígeno mientras que los animales absorben el oxígeno y liberan la mayor parte del dióxido de carbono. Y es que las plantas y árboles absorben anhídrido carbónico del aire para mezclarlo con el agua y los minerales que toman del suelo, al combinar esta mezcla con luz, producen su alimento. Este proceso se denomina fotosíntesis, y en él se libera oxígeno que va a parar a la atmósfera. Debido a la abundancia de vegetación de la selva, en su seno se producen enormes cantidades de oxígeno necesario para todo el planeta. Se ha calculado que cerca del 30% del oxígeno que consumen los seres vivos en nuestro planeta procede de las grandes selvas ecuatoriales.
En este sentido y como grandes consumidoras de CO2 las selvas son básicas en el equilibrio ecológico del planeta: resultan un muro contenedor de cambios en la temperatura y el calentamiento global por efecto invernadero.
En Inglés las selvas se denominan "rain forest", lo que traducido al castellano sería "bosque de Lluvia". En la mayoría de las selvas las lluvias se suceden casi todos los días, con frecuencia a la misma hora. Chaparrones intensos se producen en medio de un ambiente muy cálido en el que la humedad es para el ser humano de otras latitudes realmente agobiante. La selva se alimenta así misma en un ciclo del agua continuo, de forma que después de las lluvias podremos ver como se forman nubes cercanas al suelo porque el agua caída hace poco ya se está evaporando de nuevo y debido al proceso de transpiración de las plantas (liberan agua de las hojas durante la fotosíntesis). Es pues, un ciclo ininterrumpido en el que el agua cae y se evapora constantemente formando nubes que después volverán a producir lluvia. El 50% de las precipitaciones de todo el área del Amazonas se producen a causa de este sistema forestal.

Nubes bajas y cataratas en la cuenca del Orinoco
Nubosidad sobre la selva en el norte de la isla de Borneo (Malasia)

A la gran cantidad de precipitaciones y los altos niveles de humedad se une su capacidad de regular la temperatura (con su sombra disminuyen la temperatura del terreno). Esa misma cobertura vegetal  además permite el llamado "efecto esponja", consiguiendo retener el agua de lluvia que es interceptada por las copas de los árboles, suavizando el impacto sobre el suelo. El agua termina en el suelo poco a poco alimentando los ríos de forma pausada y regulada y reduciendo las inundaciones. Si la selva se tala o quema el efecto esponja desaparece y los ríos alteran su régimen, afectando al hombre que los utiliza para riego, energía y abastecimiento de agua potable a las ciudades. Se suceden entonces épocas de fuertes inundaciones y desbordamientos con momentos de escasez de agua en los cauces.
La protección de las copas de los árboles  y las raíces que entretejen el suelo y lo retienen evitan la erosión, evitando que el agua lo arrastre y se lleve la capa fértil.
Todo este proceso convierte la selva en un lugar muy húmedo en el que discurren algunos de los mayores ríos del planeta. En ella nacen y crecen el río Congo o el Amazonas, este último el más caudaloso de la Tierra, con una red fluvial de 100.000 kilómetros que conforman su cuenca. Como ejemplo de ello terminamos con una secuencia de bellas fotografías aéreas, que nos muestran el entramado de cursos de agua, zonas pantanosas y lagos existentes en las selvas ecuatoriales.


Estas fotos muestran la riqueza de los cursos de agua de la cuenca del Amazonas,
en las zonas más llanas los ríos se retuercen en continuos meandros

Cascadas Dijidji, Parque Nacional de Ivindo, Gabón (selva africana)

Bahía de Phang Nga (Thailandia)

No hay comentarios:

Publicar un comentario