El plano urbano lo podemos definir como la representación gráfica de una ciudad
hecha a escala, en el que se muestra la distribución de los espacios edificados
(viviendas, edificios públicos…) y de los espacios libres (calles, plazas,
parques…) de una ciudad. El plano urbano
nos muestra la estructura y partes de una ciudad, así como los elementos que la
forman. A través de la lectura e interpretación de un plano y de sus partes
y elementos podemos saber cuáles han sido las diferentes etapas del crecimiento de la ciudad y conocer su
historia.
2. IDENTIFICAR
Y EXPLICAR EL EMPLAZAMIENTO Y SITUACIÓN DE LA CIUDAD
•Emplazamiento: lugar
concreto sobre el que se asienta la ciudad (y en especial, la ciudad inicial):
colina, orilla de un río, borde del mar, en el centro de un valle... Hay que
observar la existencia de barreras de fijación (río, mar…) que limiten o
determinen el crecimiento de la ciudad. Hay que relacionar ese emplazamiento
con las funciones que habrían dado origen a la ciudad (defensiva-estratégica,
económica-comercial, político-administrativa, religiosa, etc.).
•Situación: relacionada
con el entorno más amplio (contexto nacional y regional), convertida la ciudad
en puerto clave, encrucijada de comunicaciones, etc. En este sentido
organizaría espacios amplios, regiones, etc.
Una vez establecido el emplazamiento
inicial, debemos observar la expansión
posterior desde el núcleo inicial (generalmente el casco viejo): en qué
dirección y de qué manera (teniendo en cuenta los posibles obstáculos
naturales). Identificamos el ensanche que
arranca siempre del casco antiguo, y el posterior desarrollo de la periferia. Igualmente señalar la situación más o
menos central que puede tener la ciudad en la actualidad.
3. DELIMITACIÓN
Y DESCRIPCIÓN DE LAS ZONAS QUE ESTRUCTURAN LA CIUDAD
4. ESTABLECER EN
CADA PARTE DE LA CIUDAD LOS ELEMENTOS BÁSICOS QUE DEFINEN LA MORFOLOGÍA URBANA
- Trazado o plano:
señalar y explicar el tipo de plano, irregular, ortogonal, radiocéntrico o
lineal.
- Edificación: por un
lado, señalar la trama urbana o disposición de los edificios (puede ser cerrada
con edificios juntos y muy próximos, o abierta, con edificios con espacios
entre sí), por otro lado, el tipo de edificación (edificios bajos o en altura,
individuales o colectivos).
- Los usos del suelo:
existencia o no espacios públicos, de grandes vías o avenidas, de zonas verdes,
polígonos industriales, áreas de servicio, zonas residenciales, etc. En
relación con ello, el predominio de un tipo de actividad económica u otra
(actividades tradicionales o modernas, predominio del sector industrial o del
terciario).
- Problemática actual:
análisis de los problemas principales que se viven en cada área urbana, así
como de las iniciativas y soluciones puestas en marcha para solucionarlos.
5. SITUAR Y
ANALIZAR EL CASCO HISTÓRICO
a) Análisis del plano:
- Observar la
pervivencia o no de la muralla, que
casi seguro existió, y explicar su función (defensa y refugio, fiscalidad). Si
no se encuentra, señalar su posible derribo por el crecimiento urbano de la
segunda mitad del XIX: debemos observar si se crearon paseos de ronda o
circunvalación en su lugar.
- Determinar el tipo de plano y explicar sus
características. En España generalmente será irregular (calles estrechas y
retorcidas, sin geometría y con desorden e irregularidad), aunque en ocasiones,
podemos encontrar otro tipo de plano (lineal en algunas ciudades del camino de Santiago
como Logroño, ortogonal en ciudades que mantienen el trazado romano como
Tarragona o Villareal, radiocéntrico en urbes como Vitoria).
- Observar si se
aprecian modificaciones de épocas
posteriores en el plano, como la apertura de calles y plazas de trazado
regular (es el caso de Madrid, con su plaza mayor geométrica o la Gran Vía).
b) Análisis de
la edificación:
- La trama es generalmente compacta y cerrada, pues los edificios se disponen muy próximos entre sí, con
manzanas cerradas, y existen muy pocos espacios abiertos (plaza del mercado o
del entorno de la iglesia). Hay que señalar que esto suele deberse al
crecimiento urbano intramuros, con una muralla que envuelve la ciudad, así como
a la desamortización del siglo XIX, que supuso la venta de espacios propiedad
de la iglesia y que incluía patios y huertos, después edificados).
- El tipo de edificios
no es visible directamente en el plano, pero se intuye que predominan los edificios de baja altura e individuales,
que sin embargo, con el tiempo han experimentado una creciente verticalización y muchos se han convertido en
colectivos. En el casco antiguo
encontramos los edificios históricos y
de valor artístico y monumental, que conviene situar (palacios, iglesias,
catedral, ayuntamiento, etc.).
c) Usos del
suelo:
Uso del suelo básicamente
residencial (viviendas). A nivel económico, pervivencia de oficios tradicionales, pequeño comercio
y talleres artesanos. En la actualidad
se ha producido una renovación, proliferando edificios oficiales y de la
administración, así como establecimientos de restauración y hoteles ligados al
creciente uso turístico.
d) Problemática
actual del casco viejo:
Señalar el deterioro
físico sufrido por calles y edificios, así como la dificultad del tránsito
de vehículos, lo que restringe la movilidad de los habitantes. Ligado a estos
factores, se ha producido en muchos casos un deterioro social: la población con más recursos abandona la ciudad
vieja buscando espacios y calidad de vida, por lo que queda población anciana y
de bajos recursos, creándose problemas de envejecimiento
y marginalidad. Actualmente, la
mayoría de los cascos históricos han sido renovados y rehabilitados, buscando
la atracción del turismo, reconstruyéndose
edificios de gran tamaño y dándoles un nuevo uso terciario (administración,
hoteles y restauración)
6. SITUAR Y
ANALIZAR EL ENSANCHE
a) Analisis de
su desarrollo:
Localizamos el
ensanche, ubicado junto al casco
histórico, y determinamos las causas de
su desarrollo: crecimiento de la población, elección como capital de
provincia o proceso de industrialización. Señalamos
la época de su desarrollo: segunda mitad del siglo XIX en el caso de las
grandes ciudades españolas como Barcelona o Madrid, primer tercio del siglo XX,
en el caso de las ciudades más pequeñas como la mayoría de las capitales de
provincia. Marcar el contraste entre el
ensanche burgués (bien dotado de servicios) y los barrios obreros
industriales (infradotados y con viviendas de baja calidad) que sufrían un
rápido deterioro.
b) Análisis del
plano:
Generalmente se trata de un plano ortogonal (plano regular, con calles anchas y largas que se
cruzan perpendicularmente, formando manzanas cuadradas).
c) Análisis de
la edificación:
- La trama es
menos densa y compacta que en el casco viejo, pero se suele estructurar en
forma de manzanas cerradas.
- En cuanto a los edificios, predominan las viviendas colectivas y en altura, con
bloques de pisos
d) Usos del
suelo:
Abundan más los
espacios abiertos, grandes avenidas,
plazas y zonas verdes. A nivel económico existe un predominio de los usos terciarios y comerciales, ya que
la industria ha sido llevada en las últimas décadas, y en la mayoría de los
casos, hacia la periferia urbana. La terciarización es visible en el desarrollo
en esta zona del CBD (centro
comercial, financiero y administrativo de la ciudad).
e)
Problemática actual del ensanche:
El contraste entre los ensanches burgueses bien dotados y
los barrios proletarios infradotados de servicios, se ha visto muy mitigado,
aunque aún hoy persiste.
Aumento excesivo de
los precios del suelo y la vivienda, lo
que favorece el asentamiento de la población más joven.
7. SITUAR Y
ANALIZAR LA PERIFERIA URBANA
a)
Análisis de su desarrollo:
Situamos la
periferia en las zonas exteriores que rodean el centro urbano. Hoy incluye una parte importante de la extensión actual
de cualquier ciudad española. Las ciudades españolas tuvieron su época de mayor
crecimiento a partir del desarrollismo de la década de 1960 y 1970, cuando el
proceso de industrialización y crecimiento económico provocan un enorme éxodo
rural. En las últimas décadas, ese crecimiento se ha consolidado en zonas aún
más periféricas, incluyendo un proceso
de suburbanización que ha supuesto la proliferación de urbanizaciones en
las zonas y localidades cercanas a la ciudad. Todo ello dificulta la
delimitación de las zonas rurales y urbanas.
b)
Usos del suelo y áreas diferenciadas:
La economía ha ido basculando cada vez más hacia la
periferia, por lo que los usos
industriales y terciarios son cada vez mayores. Surgen grandes polígonos industriales, debido a que la
industria se ha ubicado en zonas periféricas (mayor accesibilidad, costes
menores del suelo, contaminación generada). Surgen también áreas de equipamientos, que incluyen servicios, como hospitales o
universidades, y grandes superficies comerciales. Igualmente aparecen enormes espacios dedicados a las infraestructuras
de comunicaciones (autovías, rotondas, circunvalaciones, aeropuertos, etc.).
Junto a ellas, se desarrollan amplias áreas
residenciales.
c)
Análisis de las áreas residenciales:
- Las áreas residenciales suelen tener un plano mixto, con
tendencia a la regularidad y al plano ortogonal, aunque de forma menos marcada
que en el ensanche.
- La trama es en
ocasiones cerrada, aunque muchos
barrios están estructurados en trama
abierta (muy habitual en los años del desarrollismo), con espacios abiertos
entre los edificios.
- La edificación se
produce en altura y es colectiva,
formada por bloques de pisos, aunque en las últimas décadas y en las zonas más
periféricas dominan las urbanizaciones
de viviendas unifamiliares (adosados o viviendas exentas) de baja altura.
d) Polígonos
industriales:
En ellos se sitúan fábricas, almacenes y talleres. Suelen
estar en zonas de fácil accesibilidad, con trama
cerrada y plano muy regular, generalmente ortogonal, con calles anchas y
largas.
e)
Problemática actual de la periferia:
Desigualdad
social entre barrios de clase alta y media
y barrios de clase baja, con fuertes contrastes sociales. A ello habría que
añadir la proliferación en las zonas periféricas del chabolismo, que persiste sobre todo en las grandes ciudades. El
desarrollo de una política social de viviendas (Viviendas de Protección
Oficial) ha posibilitado la práctica erradicación del chabolismo en las
ciudades medias y pequeñas españolas.
COMENTARIO DEL PLANO DE VALENCIA
1. DEFINICIÓN DE
PLANO URBANO
El plano urbano lo podemos definir como la representación gráfica de una ciudad
hecha a escala, en el que se muestra la distribución de los espacios
edificados (viviendas, edificios públicos…) y de los espacios libres (calles,
plazas, parques…) de una ciudad. El plano urbano nos muestra la estructura y
partes de una ciudad, así como los elementos que la forman. A través de la
lectura e interpretación de un plano y de sus partes y elementos podemos saber
cuáles han sido las diferentes etapas
del crecimiento de la ciudad y conocer su historia.
2. EMPLAZAMIENTO
Y SITUACIÓN
Valencia es una ciudad de origen romano (aunque su trazado tiene origen medieval) que se ubica
en las proximidades del Mar Mediterráneo,
en un meandro del río Turia muy cerca de su desembocadura en el golfo de
Valencia. Se sitúa en una zona elevada, lo que le da una mayor capacidad
defensiva y además la aisla más de las posibles inundaciones. Posteriormente, la cuidad crecerá a un lado y otro del río
Turia, inicialmente hacia el sur con el ensanche y posteriormente en todas direcciones,
lo que le permitirá unirse con otras poblaciones cercanas como El Grao (el
puerto).
Su situación, desde la época romana hasta la medieval, resultó
siempre muy favorable a nivel comercial, político y estratégico. Tenía una situación estratégica respecto
a las rutas y vías de comunicación, no en vano se hallaba en la calzada
romana que discurría por la costa mediterránea y además estaba favorecida por un
entorno agrícola muy rico. Por otro lado, se
ve favorecida por la proximidad al mar y
la existencia de un puerto en sus inmediaciones. Hoy la ciudad tiene un papel central en el contexto nacional
derivado de la riqueza agrícola, de su posición geográfica estratégica en el
contexto económico e industrial español y de su puerto, el segundo de España a
nivel comercial.
3. DELIMITACIÓN DE
LAS DISTINTAS ZONAS DE LA CIUDAD
Podemos identificar el casco
viejo, en el centro, junto al meandro del Turia, que nos mostraría el
espacio ocupado por la ciudad durante la época preindustrial, hasta el siglo
XIX. Al sur del casco viejo podemos identificar el ensanche de la ciudad industrial surgido a partir de la segunda
mitad del siglo XIX y ampliado en las primeras décadas del siglo XX. Ambos
espacios están separados por unas calles que circunvalan el casco viejo y que
forman la ronda que sustituyó a la muralla. Más allá, aunque apenas visible en
el plano (salvo en la zona norte, en la otra margen del río), se observan los barrios periféricos que
constituirían buena parte de la ciudad actual y que surgirían a partir de la
segunda mitad del siglo XX.
4. SITUAR Y
ANALIZAR EL CASCO HISTÓRICO
Como en la mayoría de las ciudades españolas, la muralla no se ha conservado (aunque sí algunas de sus puertas). Se trataba
de una muralla de origen medieval que tendría una función defensiva y fiscal, y
que se derribó por el crecimiento urbano durante la segunda mitad del siglo
XIX, cuando se convirtió en un obstáculo para el desarrollo urbano y además
carecía ya de utilidad. En su lugar, y tras su derribo, surgió un enorme paseo
de ronda que circunvala el casco viejo y que es perfectamente visible en el
plano.
Como en la mayoría de las ciudades españolas, el plano del casco histórico es irregular
(calles estrechas y retorcidas, sin geometría y con desorden e irregularidad,
falta de espacios abiertos y plazas sin formas definidas). Esta irregularidad
es observable especialmente en la zona norte, donde se haya la catedral.
Observamos como la parte sur del casco viejo es mucho más
regular, por lo que probablemente sufrió modificaciones
en el siglo XIX, abriéndose nuevas calles y plazas.
La trama es
compacta y cerrada, pues los edificios se
disponen muy próximos entre sí, con manzanas cerradas y pocos espacios abiertos,
aunque algunos se abrieron posteriormente. Hay que señalar que esto suele
deberse al crecimiento urbano intramuros, con una muralla que envolvía la
ciudad, así como a la desamortización del siglo XIX, que supuso la venta de
espacios propiedad de la iglesia y que incluía patios y huertos, después
edificados.
El tipo de edificios no es visible directamente en el plano,
pero se intuye que predominaron los edificios
de baja altura, con frecuencia individuales, que sin embargo, con el tiempo
han experimentado una creciente
verticalización y la mayoría se han convertido en colectivos. En el casco
antiguo encontramos los edificios
históricos y de valor artístico y monumental, ese es el caso de la catedral
de Valencia, así como varias iglesias y palacios.
Los usos del
suelo en época preindustrial serían
residencial (viviendas), industrial (oficios tradicionales y artesanía textil)
y comercio ligado al puerto cercano. En
la actualidad se ha producido una renovación, la industria se haya en la
periferia y proliferan edificios oficiales y de la administración, así como
establecimientos de restauración y hoteles ligados al creciente uso turístico. En la parte sur,
renovada urbanísticamente, se desarrollaran actividades terciarias ligadas al
comercio, los espectáculos o los bancos.
Es posible que amplias zonas del casco viejo, sobre todo en
la zona norte, hayan sufrido un fuerte deterioro
físico en calles y edificios, a lo que hay que añadir la dificultad del
tránsito de vehículos, lo que restringe la movilidad de los habitantes. Ligado
a estos factores, es probable que en muchos casos haya habido un deterioro social: la población con más
recursos abandona la ciudad vieja buscando espacios y calidad de vida, por lo
que queda población anciana y de bajos recursos, creándose problemas de
envejecimiento y marginalidad.
Actualmente, como la mayoría de los cascos históricos habrá sufrido procesos de renovación y
rehabilitación, buscando la atracción
del turismo, reconstruyéndose edificios de gran tamaño y dándoles un nuevo
uso terciario (administración, hoteles y restauración).
Plano de Valencia realizado por el padre Tosca en 1704. Fuente: elmundo.es |
5. SITUAR Y
ANALIZAR EL ENSANCHE
El ensanche se
ubica junto al casco histórico, envolviéndolo por el sur. Se construirá en la
segunda mitad del XIX y principios del XX y trata de hacer frente al
crecimiento de la población debido al
desarrollo agrícola del entorno, el proceso de industrialización, el
crecimiento de la actividad del puerto cercano y la capitalidad provincial. Los
barrios obreros de la época, debido a su rápida degradación, hoy apenas serán
reconocibles, aunque lo lógico es que estuvieran en torno al puerto cercano de
El Grao.
Tiene un plano
ortogonal (plano regular, con calles anchas y largas que se cruzan
perpendicularmente, formando manzanas cuadradas).
La trama es menos densa y compacta que en el casco viejo, pero se
estructura también en forma de manzanas
cerradas.
En cuanto a los edificios, predominan las viviendas colectivas y en altura, con
bloques de pisos.
Abundan más los
espacios abiertos, grandes avenidas,
plazas y zonas verdes. A nivel económico existe un predominio de los usos terciarios y comerciales, ya que
la industria ha sido llevada en las últimas décadas, y en la mayoría de los
casos, hacia la periferia urbana. Observamos una gran estación de ferrocarriles
dentro del ensanche.
El excesivo precio
del suelo y la vivienda no favorece el
asentamiento de la población más joven.
6. SITUAR Y
ANALIZAR LA PERIFERIA URBANA
La periferia
apenas es visible en el plano, aunque podemos comentar algunos aspectos
generales. Situamos la periferia en las zonas exteriores que rodean el centro
urbano. Hoy incluye una parte importante
de la extensión actual de cualquier ciudad española. Las ciudades españolas
tuvieron su época de mayor crecimiento a partir del desarrollismo de la década
de 1960 y 1970, cuando el proceso de industrialización y crecimiento económico provocaron
un enorme éxodo rural. En las últimas décadas, ese crecimiento se ha
consolidado en zonas aún más periféricas, incluyendo un proceso de suburbanización que ha supuesto la proliferación de
urbanizaciones en las zonas y
localidades cercanas a la ciudad. Todo ello dificulta la delimitación de las
zonas rurales y urbanas.
La economía ha ido basculando cada vez más hacia la
periferia, por lo que los usos
industriales y terciarios son cada vez mayores. En Valencia, centro de una
zona industrial y económicamente desarrollada, con un gran puerto de
exportación e importación, existen grandes polígonos
industriales, debido a que la industria se ha ubicado en zonas periféricas
(mayor accesibilidad, costes menores del suelo, contaminación generada). Existirán
también áreas de equipamientos, que
incluyen servicios, como hospitales o universidades, y grandes superficies comerciales.
Igualmente, surgen enormes espacios
dedicados a las infraestructuras de comunicaciones (autovías, rotondas,
circunvalaciones, aeropuertos, etc.). Junto a ellas, se desarrollan importantes
áreas residenciales. Estas tendrán un
plano mixto, con tendencia a la regularidad y al plano ortogonal, aunque de
forma menos marcada que en el ensanche. La trama
es en ocasiones cerrada, aunque muchos
barrios están estructurados en trama
abierta (muy habitual en los años del desarrollismo), con espacios abiertos
entre los edificios. La edificación se
producirá en altura y será colectiva,
formada por bloques de pisos, aunque en las últimas décadas y en las zonas más
periféricas dominan las urbanizaciones
de viviendas unifamiliares (adosados o viviendas exentas) de baja altura.
En los polígonos
industriales se ubican las fábricas, almacenes y talleres. Suelen
estar en zonas de fácil accesibilidad, con trama
cerrada y plano muy regular, generalmente ortogonal, con calles anchas y
largas.
Especialmente llamativo en cuanto a los usos del suelo, es la creación de un enorme espacio verde en lo que fue el antiguo cauce
del río Turia (desviado por otra zona) y en el que además se ha ubicado un
espacio emblemático: la Ciudad de las
Artes y las Ciencias, que se ha convertido en punto de referencia de la
modernización y renovación urbanística de la ciudad.